TRENZA DE CHOCOLATE: DELICIOSA Y SENCILLA.
Hoy os traemos una receta rápida, sencilla y deliciosa, ideal para hacerla cualquier día de la semana porque solo necesitas 20 minutos y el resultado es espectacular. Se trata de la trenza de chocolate negro con almendras. ¿Qué necesitas? Toma nota:
– Hojaldre
– Chocolate negro especial para postres.
– Almendras enteras
– 1 huevo.
– Azúcar o virutas de chocolate.
Para empezar y mientras calientas el horno a 180 grados, hay que extender la masa de hojaldre en una superficie plana. A continuación debes poner las láminas o cuadrados de chocolate en el centro en posición horizontal y cubriendo todo el ancho del hojaldre.
El chocolate lo debes poner al gusto, aunque no conviene excederse porque puede resultar demasiado empalagoso. Un grosor de dos láminas o cuadraditos es más que suficiente. A continuación, hay dos opciones, puedes poner las almendras enteras sobre el chocolate o trocearlas, eso ya es cuestión de gustos.
Posteriormente, debes recortar un trozo de hojaldre sobrante de arriba y otro de abajo, no demasiado grande, para poder cerrar sin problema el dulce. Una vez hecho esto, hay que cortar de los trozos de hojaldre unas tiras que una vez cerrado el dulce, se colocarán en la parte superior del postre haciendo posible la característica trenzada del dulce que estamos realizando.
Para finalizar, hay que repartir con una brocha por la parte superior del postre el huevo batido que será lo que le dé un tono dorado y brillante al hornearse.
Una vez que el horno esté caliente a 180 grados, debemos introducir la trenza durante unos 15 minutos. La sacaremos de nuevo para espolvorear por encima azúcar blanquilla y volveremos a dejarlo otros cinco minutos (es importante espolvorear el azúcar al final para evitar que se queme), y ya tenemos nuestro postre preparado. En el caso de que optes por las virutas de chocolate se pueden añadir antes de introducir el postre en el horno.
Para los más golosos existe otra posibilidad y es añadir chocolate fundido en la cobertura de la trenza y algunas almendras picadas en vez del azúcar.
Este dulce permite muchas combinaciones. Puedes introducir frutas con el chocolate, hacerlo de chocolate blanco… la imaginación al poder, porque ya sabéis que en cuestión de gustos no hay nada escrito.